Noche de San Juan

Esta es una fecha en la que numerosas leyendas fantásticas son unánimes al decir que es un período en el que se abren de par en par las invisibles puertas del “otro lado del espejo”, cuentan que las plantas venenosas pierden su dañina propiedad y, en cambio, las salutíferas centuplican sus virtudes (buen día para recolectar plantas medicinales en el campo); el rocío cura ciento y una enfermedades y además hace más hermoso y joven a quien se embadurne todo el cuerpo; los helechos florecen al dar las doce campanadas...

En definitiva, la atmósfera se carga de un aliento sobrenatural que impregna cada lugar mágico del planeta y es el momento propicio para estremecernos, ilusionarnos y narrar a nuestros hijos, nietos o amigos toda clase de cuentos, anécdotas y chascarrillos sanjuaneros que nos sepamos.

Esta noche se abre la puerta que nos introduce al conocimiento del futuro y a las dimensiones mágicas de la realidad. Es la noche en que los entierros arden, el Diablo anda suelto y los campos son bendecidos por el Bautista.

Nuestro amigo Juan “El Tinajo”, vecino de Játar cuenta que allá por los años 40 y pico, cuando el era un mancebo y contaba con unos 15 o 16 años la noche del 23 al 24 de junio, los “mozuelos” del lugar se reunían a la luz de la embrujada luna para acopiarse de los más selectos ramos de flores, los cuales iban acompañados de una autentica declaración de amor para las hermosas jóvenes. Los ramos eran depositados en lo que comúnmente se llamaba “El Tranco”, de manera que al amanecer fuera hallado por las “mozuelas” a las que les confesaban su amor. En tanto ellas también se reunían para ir a los arroyos, ríos, fuentes o manantiales (en aquella época el agua abundaba) antes del amanecer a lavarse la cara y los pies para mantenerse joven y el cabello para conservarlo hermoso. Esa noche las aguas están benditas por el Bautista.. Entonces si que era todo un suceso la acción…….. ¡Cómo cambian los tiempos!.

También recuerda que a la edad de 11 años varios amigos mayores que él le contaron que la higuera y el "pesebre" (helecho) florecen esta noche y que quien posea una de estas flores seria muy afortunado y su curiosidad e inocencia lo llevo a ver como florecía el helecho, el espectáculo ocurría entra las doce y la una de la madrugada de la noche de San Juan….¡valla oritas!. Cuenta que a medida que se acercaba a la orilla del río, pues es donde se encuentran los más vigorosos helechos, se escuchaba crujir cada rama, hoja y todo lo que se iba encontrando a su paso, eran unos estruendos tan estremecedor teniendo en cuenta todas las historias que le habían contado de la noche de San Juan, que sin dudarlo un momento se dispuso a correr sin parar hasta llegar a su casa, se acostó en su calida cama de “farfollas” y no se destapo la cabeza durante toda la noche.

Hoy en cambio los niños de Arenas tienen como tradición no dejar que el día 24 de junio no quede nadie que se escape del agua de sus cubos, botellas o pistolas de agua, se reúnen en plazas y fuentes a bañar a todo el que se cruce y si alguien se resiste, ¡a la pilaaaaa!

Por parte del ayuntamiento de Arenas del Rey tiene previsto el día 24 de junio abrir la piscina municipal. ¡Chicos y chicas el verano llegoooooo! ¡Adiós a la escuela!

D. Robles.

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